Si tan solo uno pudiera realmente retroceder en el tiempo para conocernos a nosotros mismos más jóvenes o incluso tener la increíble oportunidad de hablar con esa persona especial que hemos perdido. Desafortunadamente, nuestro tiempo fijo no nos permite hacer eso. Pero afortunadamente, “The Adam Project” logró hacernos creer que en realidad es posible durante su tiempo de ejecución.
Dirigida por Shawn Levy, el hombre detrás de clásicos como “Cheaper by the Dozen”, “Night at the Museum” y la reciente película de acción “Free Guy”, “The Adam Project” sigue a un piloto de mediana edad llamado Adam (Ryan Reynolds ), que puede viajar en el tiempo. Pero no es hasta que se queda atascado en el año 2022 que las cosas comienzan a volverse más complicadas, interesantes y, francamente, mucho más divertidas. Por suerte para nosotros, ver a Adam estancado en 2022 fue realmente una bendición disfrazada. Verá, al quedarse atrapado en 2022, termina encontrándose con su pequeño y frágil yo más joven, interpretado por el recién llegado Walker Scobell. El joven que en mis libros se ha ganado el título de la actuación más divertida y adorable del año hasta el momento. Es esa dinámica entre Reynolds y Scobell con más de unas pocas interacciones hilarantes entre ellos y algunas referencias cinematográficas inteligentes en el camino a películas como “Star Wars” y “Regreso al futuro” lo que hace que esta producción sea lo suficientemente entretenida y fácilmente la asegura como una sola. de las mejores películas originales de Netflix del año.
Ahora, esta película no es solo diversión y juegos, también tiene su lado emocional. Los escritores realmente lograron ponerlo todo sobre la mesa y equilibrarlo de tal manera que también podamos respirar y disfrutar esas pequeñas pero poderosas escenas entre las secuencias de acción. Algunas escenas clave que nos conectan con la película con una historia mucho más tangible y cercana. Dejando a un lado las entretenidas historias sobre viajes en el tiempo, esta película, sobre todo, trata sobre el duelo y la familia.
Para dar vida a ese lado emocional de la película, tenemos que agradecer a Jennifer Garner, Mark Ruffalo y Zoe Saldana. Todos ellos brillan desde el primer momento en que aparecen en pantalla y más cuando cuentan con esas mismas escenas clave con nuestros protagonistas que vuelven a poner sus pies y los nuestros en el suelo. Explicar con más detalle cómo sus roles entran en juego e impactan tanto al “Adam de mediana edad” como al “Butternut Sippy Cup” sería grosero de mi parte y arruinaría toda la experiencia de la película para ustedes, así que no entraré en eso en este revisión especial.
Pero sepa esto, esta película y sus personajes exploran algo que todos deseamos profundamente que fuera posible. No importa cuál sea el motivo, es humano desear la oportunidad de retroceder en el tiempo y poder reunirse con ese ser querido una vez más. Algo que esta película nos muestra impecablemente en un tono más ligero y con sentido del humor (que solo Reynolds y ahora Scobell podrían entregar) es que no podemos cambiar nuestra realidad ni siquiera el destino de otra persona. Pero lo que sí podemos hacer es disfrutar del tiempo que tenemos ahora y vivir el presente.
Si ese mensaje llega a todos los hogares que deciden darle una oportunidad a esta película cuando se estrene en Netflix este viernes, entonces puedo confirmar que la película hizo lo que fue creada para hacer y lo hizo sin problemas.